Quizás no se programen con la frecuencia que merecen, pero existe un repertorio latinoamericano amplio para el clarinete solista con orquesta sinfónica. Repertorio que, por demás, crece cada año con la inclusión de nuevas obras. En este post te presento 3 conciertos escritos en la última década por destacados compositores de México, Brasil y Chile.
El compositor mexicano Javier Álvarez, recientemente fallecido, compuso en 2017 “Vendedor de ilusiones”, un concierto para clarinete y orquesta que fue escrito para el clarinetista, también mexicano, Fernando Domínguez y la Orquesta Sinfónica de Heredia, con apoyo del Fondo Municipal para las Artes Escénicas y la Música de Mérida (Yucatán). La orquestación, además del clarinete solista, incluye 2 flautas, 2 fagotes, 2 cornos, 3 percusionistas, piano y cuerdas. La obra se articula en 3 movimientos: (1) Ilusión en tiempo presente, (2) Metropasado, ri-tornillo y requesón, y (3) Futuro compuesto. La duración total está alrededor de los 17 minutos.
El compositor brasileño Liduino Pitombeira escribió en 2016 su Concierto para Clarinete Op. 208 dedicado al clarinetista Johnson Machado y la Orquestra Sinfónica del Teatro Nacional Claudio Santoro. La nutrida orquesta que acompaña al clarinete solista se compone de piccolo, 2 flautas, 2 oboes, corno inglés, 2 clarinetes, clarinete bajo, 2 fagotes, contrafagot, 4 cornos, 3 trompetas, 3 trombones, tuba, timbales, 3 percusionistas y cuerdas. La obra está dividida en 3 movimientos: (1) Incelença, (2) Choro, y (3) Baião, y dura alrededor de 16 minutos.
Editorial Nacional de Chile publicó en 2017 el Concierto para Clarinete y Cuerdas del compositor chileno Carlos Zamora. Articulada en 3 movimientos, con la tradicional alternancia de tempos rápido-lento-rápido, esta obra tiene una duración alrededor de 15 minutos. Como su nombre lo indica, la orquesta que acompaña al clarinete solista se compone únicamente de instrumentos de cuerda.
Este post es apenas el inicio de una exploración que continuaremos luego sobre este repertorio fascinante y, a la vez, poco explorado, como atestigua la escasez de grabaciones profesionales existentes.
Javier Asdrúbal Vinasco 